El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, con la
colaboración de Cepsa, iniciará el próximo mes de junio la tercera edición de
la iniciativa ‘Anaga a pie’, un programa de rutas guiadas que pretende dar a
conocer los senderos de la Reserva de la Biosfera del Macizo de Anaga
coincidiendo con el primer aniversario de su declaración. El primero de los
nueve recorridos previstos será ‘Vida en los caminos, el agua en Anaga’, que se
desarrollará el sábado 4 de junio.

“Hay rutas de dificultad baja, media y alta, con lo que
están abiertas a la participación de prácticamente todos los vecinos, que
podrán adentrarse en enclaves únicos que se estrenan en esta edición como el
Camino de las Lecheras o el Camino de Abicore, junto a los ya clásicos como los
de las primeras galerías de agua, el camino real de Anaga, o el trayecto a pie
hasta la playa de Antequera”, señaló el edil.

Para el director de la Refinería Tenerife y Operaciones de
Cepsa en Canarias, José Manuel Fernández Sabugo, “estamos muy satisfechos de
poder volver a colaborar un año más con este intenso programa de rutas guiadas
que contribuyen, no solo al conocimiento de los magníficos parajes que esconde
Anaga, sino también a sensibilizar a la población sobre lo importante que es
cuidar y conservar lo que es más nuestro”.

Programa

‘Anaga a pie’ se estrenará el 4 de junio con la ruta
denominada ‘Vida en los caminos, el agua en Anaga’, un recorrido de 11
kilómetros, de dificultad media, que unirá los núcleos de Taborno y Valleseco.
Se trata de un itinerario que atesora elementos de gran interés patrimonial
vinculados a la relación de los habitantes de Anaga con su difícil entorno.

El siguiente sábado, 11 de junio, se realizará el recorrido
comprendido “De la Punta de Anaga a Antequera’, un trayecto de 5,5 kilómetros y
dificultad media-baja que parte del cementerio de la Punta de Anaga y que
llevará al senderista desde el Monteverde hasta la arena de una de las mejores
playas de Tenerife.

La ‘Ruta a Taborno’ se celebrará el 18 de junio. Partiendo
de Casa Carlos, en las proximidades de la Cruz de Taborno, se seguirá un
sendero plácido, de 7 kilómetros de longitud y baja dificultad, rodeado de
exuberante vegetación.

El mes de julio se abrirá, el día 2, con el recorrido ‘De
Valle Brosque a Taganana’, enlazando los valles de El Bufadero y Taganana hasta
la zona conocida como Los Descansaderos. El recorrido, de 7,5 kilómetros y
dificultad media-alta, atraviesa parajes de gran belleza como El Majimial o el
monte de Las Vueltas.

El 16 de julio será el turno del ‘Camino de Abicore’, con 9
kilómetros y dificultad media-alta. Los senderistas recorrerán el sendero de San
Andrés a Taganana pasando por el camino tradicional que unió a ambos valles
desde tiempos prehispánicos.

Tras el parón de agosto, para evitar las altas temperaturas,
las rutas de ‘Anaga a pie’ regresarán otra vez el 10 de septiembre con ‘De Afur
a Taganana, por Tamadiste’. Este sendero, de dificultad media y 7,3 kilómetros
de longitud, pasa por Tamadiste, el barranco más emblemático de la Reserva de
la Biosfera de Anaga.

La ‘Ruta circular de Chamorga’ se realizará el 24 de
septiembre. Se ha diseñado un recorrido de dificultad media-baja y 4,5
kilómetros, que nos permite adentrarnos en el bosque de laurisilva y contemplar
el panorama desde dos de los miradores más bellos de Tenerife, Vista Las Palmas
y la Atalaya de Tafada.

Ya en octubre, el día 8, tendrá lugar la ruta ‘De Benijo a
Roque Bermejo’, consistente en recorrer el camino de la costa a través de la
vía tradicional que enlazaba Taganana con el Faro de Anaga y las haciendas de
Las Palmas de Anaga y Roque Bermejo. Este sendero tiene una longitud de 8,8
kilómetros y dificultad media.

La iniciativa ‘Anaga a pie’ concluirá con el noveno y último
recorrido, ‘Camino de Las Lecheras, uniendo centros históricos. Esta ruta,
fijada para el 22 de octubre, es de dificultad media y tiene una longitud de
14,7 kilómetros. Se trata de una oportunidad única para enlazar las dos
ciudades, Santa Cruz y La Laguna, que integran el área metropolitana de
Tenerife. Los senderistas transitarán por caminos tradicionales, cruzando
montañas y barrancos, y podrán disfrutar de espectaculares vistas de ambas
poblaciones. Este recorrido une dos caminos ancestrales muy tradicionales a
través de un entorno netamente rural y, en su momento, la ruta fue fundamental
para el aprovechamiento de los recursos naturales y el abastecimiento de los
mercados de la zona.