La
sinergía del grupo de jóvenes emprendedores participantes en el Nido
Market propició que este novedoso evento, celebrado ayer en el
restaurante Burger Mel de Santa Cruz, fuese todo un éxito. A medida que
fue avanzando la tarde, decenas de curiosos se acercaron hasta el
restaurante de cocina vegetariana y vegana para conocer a las diferentes
empresas que se dieron cita en este primer mercadillo y disfrutar de
otras actividades como talleres, charlas y exposiciones de pintura y
fotografía.
Los participantes, mayoritariamente negocios con sede en Santa Cruz,
eran de lo más variopintos, había espacio para la ropa y complementos
vintage de las tiendas Vestidor Vintage y The Small Boy Design, los
diseños personalizados de Encamisa2, quienes llevaron una amplia
selección de divertidas tazas y camisetas, y la joyería de Made By Nisa,
cuyos diseños se pueden adquirir en su página o en las tiendas Victoria Kalp y Galería Creativa.
También tenían su rinconcito Alma Salada, un proyecto singular que os
decubrí hace tiempo a través de este reportaje; Carlos y Eduardo, dos emprendedores que están implantando eficazmente la cultura de la agricultura
ecológica con los huertos urbanos de su empresa Urban Tomate y por
último, Finca Vikara, un sitio ideal para todo aquel que necesite
desconectar de su rutina diaria.
Mención especial para Burger Mel, además de ceder el espacio, puso a la
venta una amplia variedad de repostería vegana y ofreció una degustación
gratuita a todos los asistentes; asimismo, quiero citar a Airam Peraza,
quien realizó una gran charla de coaching deportivo en la que invitó al público a reflexionar sobre todo aquello que mentalmente nos impedimos a
llevar a cabo. Mis más sentida enhorabuena a todos los que ha hecho
posible el Nido Market, un nido que ya no tiene huevos porque los
polluelos han aprendido a volar haciendo lo que realmente les apasiona.